Se adapta a toda clase de suelos con unos fuertes estolones que le dan mucho poder de cubrición y aguante al pisoteo.
Época de siembra, de Abril a Septiembre.
Durante el invierno, cuando la temperatura baja de 8-10 grados centígrados, entra en latencia perdiendo el color y amarilleando, por lo que se suelen realizar resiembras otoñales con Lolium perenne.